El Sistema de Gestión Medioambiental en el futuro de las empresas

En virtud de la legislación publicada en la Comunidad Europea, las organizaciones están ahora obligadas a publicar un informe de sostenibilidad con datos "no financieros". Es en este sentido en el que la implantación del Sistema de Gestión Medioambiental (SGMA) puede llegar a ser fundamental para el futuro de las empresas.

La sostenibilidad ha dejado de ser un concepto innovador para las organizaciones en el ecosistema empresarial actual. Éstas comprenden cada vez mejor la importancia de aplicar políticas sostenibles, ya que vivimos un periodo crítico en términos medioambientales y, además, puede ser beneficioso para la propia organización, ya que le permite posicionarse positivamente ante los consumidores, que quieren verse reflejados en su filosofía y sus principios.

Por otra parte, en virtud de la legislación publicada en la Comunidad Europea, las organizaciones están ahora obligadas a publicar un informe de sostenibilidad con datos "no financieros". Es en este sentido en el que la implantación del Sistema de Gestión Medioambiental (SGMA) puede llegar a ser fundamental para el futuro de las empresas.

Pero, ¿qué es un Sistema de Gestión Medioambiental?

Según la norma 14001, el Sistema de Gestión Medioambiental está incluido en el sistema de gestión global de una organización que tiene como objetivo controlar el medio ambiente mediante un enfoque estructurado y planificado en todos sus aspectos (aire, agua, energía, etc.), implicando a toda la estructura de la organización y a todos aquellos que se ven influidos por las actividades, equipos, productos y procesos de la organización que causan o pueden causar daños medioambientales, implantando un proceso proactivo de mejora continua.

Este proceso es dinámico, ya que está sujeto a una evaluación periódica, en la que se analizan los objetivos y se fijan metas para el cumplimiento de las medidas correctoras aplicadas. Este esfuerzo de gestión debe traducirse en una mejora continua del comportamiento de la organización en materia medioambiental.

Cuando implantamos el Sistema de Gestión Medioambiental en una organización, los objetivos y metas deben ser coherentes con su política medioambiental, incluidos los compromisos relativos a la prevención de la contaminación, el cumplimiento de los requisitos legales aplicables y otros requisitos que la organización suscriba. Para establecer y revisar sus objetivos y metas, la organización debe tener en cuenta los aspectos medioambientales significativos, las tecnologías disponibles, sus requisitos financieros, operativos y empresariales, así como la opinión de las partes interesadas externas e internas.

Posteriormente, la organización debe establecer, implantar y mantener programas dirigidos a la consecución de los objetivos: el Programa de Gestión Medioambiental (PGA). Los programas deben incluir la identificación de responsabilidades para cada uno de los objetivos y metas, los niveles y funciones pertinentes de la organización, así como los medios y plazos para alcanzarlos. La organización también puede establecer un procedimiento para controlar la aplicación del PGA y para revisarlo y/o modificarlo periódicamente de acuerdo con los requisitos preestablecidos de la política medioambiental y teniendo en cuenta los aspectos medioambientales significativos de las actividades, productos y servicios.

Por tanto, implantar un SGMA en una organización puede ayudar a reducir riesgos y problemas:

• Aumento de los costes por motivos medioambientales;
• Incumplimiento de la legislación medioambiental;
• Barreras a la exportación impuestas por los países más exigentes debido al incumplimiento de los objetivos medioambientales;
• La creciente preferencia por los bienes y servicios producidos por empresas que se comportan correctamente en términos medioambientales.

En resumen, el SGMA permite a las organizaciones desarrollar una política medioambiental que proporciona mejores resultados empresariales. Además, el Sistema de Gestión Medioambiental ayuda a reducir costes, disminuir el consumo de agua, electricidad, etc. También ayuda a la empresa a posicionarse en el mercado de forma competitiva y estratégica, ofreciendo al consumidor una alternativa preocupada por las cuestiones medioambientales y los impactos que la empresa puede tener en el medio ambiente.

En este sentido, es importante que la empresa se comprometa a todos los niveles operativos, especialmente la alta dirección, para que la implantación del SGMA sea un éxito y permita a la organización desarrollarse de forma consciente y saludable para la sociedad.

Fuente: SmartPlanet

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